Cuarto y último juego de la serie para trabajar los controles. Se conoce por "el portero sin manos".
Colocamos a los jugadores por parejas a 6-8 metros de distancia uno de otro. Cada pareja con un balón y cada jugador defiende una portería hecha con conos de 3-4 metros. Los jugadores hacen de defensor y de atacante.
El atacante debe intentar hacer gol en la portería defendida por su oponente y el defensor debe parar el balón sin usar las manos, o sea, controlar la pelota para hacerse con ella.
El objetivo principal que se persigue es la mejora de la técnica en el control del balón.